Las estrategias de aprendizaje son la forma en la que las personas se organizan y utilizan un conjunto particular de habilidades para aprender contenido o realizar otras tareas de manera más efectiva y eficiente en cualquier entorno académico o no.
Se trata de una serie de operaciones y acciones que los estudiantes usan para optimizar los procesos de obtención y almacenamiento de información y conceptos.
El objetivo final de estas estrategias es que los estudiantes sean capaces de extraer esta información de la memoria para aplicarla.
La instrucción de estrategias de aprendizaje se enfoca en estrategias que facilitan el proceso de aprendizaje activo al enseñar a los estudiantes cómo aprender y cómo usar lo que han aprendido para resolver problemas y tener éxito.
Estas estrategias implican enseñar cómo desarrollar un plan para estudiar para una prueba, monitorear la comprensión del contenido, aclarar los materiales y evaluar el trabajo, y ayudan a las personas a elegir y emplear eficazmente la técnica adecuada para realizar una tarea o cumplir un objetivo de aprendizaje específico.
Este tipo de aprendizaje autorregulado es la clave para un aprendizaje permanente exitoso e incluye el desarrollo de estrategias tales como el establecimiento de metas, la autoinstrucción y el autocontrol.